Desde la adolescencia la mente me había provocado sufrimiento con inseguridades e insatisfacción, sufrimiento que aumentaba por el miedo a hablar en público, debido a la tartamudez. Así que la primera vez que leí en un libro que no debía identificarme con mis pensamientos, me sentí liberado. Desde entonces decidí incorporar a mi vida la práctica de Mindfulness.
Los primeros años fueron de búsqueda, leyendo todo tipo de libros sobre meditación y espiritualidad. Me sentía tan fascinado por lo que estaba descubriendo que no hacía más que hablar de ello a todo el que podía. Después de cuatro años, llegue a la conclusión quesi quería llegar a una comprensión profunda que transformara mi vida, tenía que ponerle mucha más energía a mi práctica. Me centre en el Budismo Theravada y en la meditación Vipassana.
Empecé a meditar todos los días y traté de encontrar a alguien que me enseñara a meditar, así que asistí a unos cuantos retiros de silencio. Uno de estos retiros fue impartido por un monje Budista Occidental Theravada de la tradición de la Forest Sangha. El retiro me hizo decidirme a visitar uno de sus monasterios en Italia. Tras un periodo inicial residiendo allí como laico, me ordené como Anagarika (postulante) y Samanera (Novicio monje mendicante) recibiendo formación monástica, llegando a vivir durante tres años y ocho meses en diferentes monasterios en Italia (Santacittarama) e Inglaterra (Aruna Ratanagiri y Amaravati).
Desde abril del 2015, fecha en la que regresé a España, estoy continuando mi práctica espiritual, ofreciendo talleres en los cuales comparto las enseñanzas recibidas y los insight adquiridos en mi práctica.